jueves, 21 de abril de 2011

Cuando sin darte cuenta escribís su nombre en la hoja... ahí ya esta, ya esta flaca, estas al horrrrno
Que hacemos con todo esto? Me pregunto si pensamos lo mismo...

lunes, 11 de abril de 2011

Mal Necesario

Sí, lo son
Odio generalizar, odio el sexismo y odio las frases armadas, pero lo juro, son TODOS iguales. Todos, desde los más chicos a los más grandes, desde los intelectuales a los atorrantes, desde los tímidos hasta los más extrovertidos, desde los perfectos carilindos hasta las bellezas exóticas, sin diferenciación de edad, religión, nacionalidad o preferencias de cualquier tipo. Todos buscan lo mismo, de las mismas maneras, casi en el mismo tiempo. Todos piensan igual en el fondo, todos sienten igual en determinado momento y actúan igual en cierta manera. Y lo peor, ninguno se hacer cargo y ponen exactamente las mismas excusas que, obviamente, derivan en "son todas histéricas. Nah, qué histéricas, son todas putas!".
Y como siempre digo, esto no es casualidad, no se pusieron de acuerdo en una convención mundial masculina, nadie se vuelve pelotudo de golpe, no. Hecho social, usos y costumbres, mandatos sociales, capitalismo, machismo primitivo, boludez extrema, no me interesa, pero que son todos igualmente pelotudos, lo son. Desde que nacen hasta la tumba. He dicho. Y este no es el primer post vulgar de todo mi blog, pero con la indignación que tengo no me dan ganas de escribir poéticamente lo harta que me tienen los tipos últimamente.
Porque no valoran la amistad, porque son asquerosamente egoístas, porque son inmaduros hasta que se mueren, porque jamás se hacen cargo de nada, porque no se planifican a futuro, porque son materialistas y materializantes, porque son incomprensivos al límite, porque son desinteresados y a veces hasta dejados, porque todos son aunque sea algo machistas, porque se divierten de maneras estúpidas, porque piensan con la cabeza de abajo, los hombres son todos iguales... y terriblemente necesarios.